viernes, 15 de octubre de 2010

El tiempo pasa... el espacio cambia...


Si, el tiempo, lo único que realmente no podemos controlar... se va y no regresa, al menos no por ahora...
Mi amiga Luisa dice: no te malpases... no pienses en el tiempo que ya pasó, piensa en el tiempo que tienes por delante y por hacer todo eso que quieres... Pero es inevitable voltear a ver el pasado. Muchas veces creemos que vivimos el presente y resulta que sólo es la inercia del pasado. Pues bueno, en el intento de vivir el presente, he caído en la corriente que fluye y viene desde más atrás. No es hasta que tomo una nueva decisión cuando me doy cuenta que empiezo a usar mi tiempo efectivo. Muchos dirían, si, efectivamente, eso es obvio, tomas decisiones hoy y usas tu tiempo hoy, pero resulta que las decisiones se vuelven un evento pasado y siguen en el camino, recordándonos que las tomamos.

Ayer tomé la primera decisión contundente en mi vida después de mucho tiempo. Mover mi cuerpo. Es increíble cómo un poco de actividad física puede desbloquear la mente. Dejar que todo fluya con mayor naturalidad y sobre todo, que la vida se abra ante nosotros. Cuerpo, mente y espíritu no están separados. ¿En qué momento el hombre se atrevió a separarlos? Sí, ya se, la historia tiene la respuesta pero, saberlo no hace que como sociedad las mantengamos unidas.

Tenemos esta tendencia a simplificar mucho las cosas, creyendo que con esto solucionamos el Universo. Los físicos somos el ejemplo a seguir, reducimos un problema no simétrico y con ciertas variaciones temporales a algo simétrico y esférico y que no cambia con el tiempo. Nada más alejado de la realidad, pero increíblemente ¡mucho funciona! Los modelos matemáticos, teóricos, las observaciones, mucho parece encajar en nuestros modelos simplificados. No es de sorprendernos que lo traslademos a nuestra vida diaria y por lo tanto, pedernos la inmensidad del conjunto, las variables que aunque poco, si afectan nuestro entorno y que a la larga, pueden llevarnos a resultados completamente diferentes a los que esperábamos. 

Perdemos de vista que una situación no consiste de una, sino de un conjunto. Vemos el arcoíris y nada más que eso, no vemos las nubes alrededor, el sol que intenta asomarse detrás de esa cortina, las plantas y el entorno, olvidamos sentir la temperatura, el viento, la humedad del ambiente, ser conscientes de nuestra locación geográfica, entre otras tantas cosas que fueron las que nos permitieron disfrutar de ese fenómeno maravilloso en el cielo y nos limitamos a ver al objeto como algo aislado.

Por fortuna, los momentos de lucidez existen y es en estos lapsos cuando abrimos nuestra mente y vemos al conjunto maravilloso que nos rodea, que nos mueve, que nos permite existir. Una máquina tan compleja que no es necesario entenderla, pero que sí es importante sentirla, saber que ahí está y que evoluciona, cambia, se mueve... Si supiéramos movernos a su ritmo, muchos seríamos realmente felices y no dopadamente felices como los humanos solemos estar.

El tiempo... única variable que no se mueve en el eje negativo y del cual no cobramos conciencia. El espacio... lo doblamos a nuestro antojo y aún así, no entendemos su esencia y mucho menos sabemos movernos en él.

domingo, 28 de febrero de 2010

A dos años de las elecciones presidenciales.


¡Hola de nuevo!

En esta ocasión se me ocurrió recordar un poco del drama que vivimos los mexicanos en las elecciones federales del 2006. Recuerdo que muchos de nosotros fuimos con gran esperanza a votar, la esperanza era generalizada. Tanto los de izquierda como los de derecha y centro, salimos a votar, fueron unas elecciones con "poco" abstencionismo. Sin embargo, el papel de las instituciones y de los organismos dedicados a vigilar la legalidad del evento dejaron mucho que desear. Empezando por el simple hecho de que el "software" utilizado para el conteo era ya como los "dados cargados" de nuestros ejercicios de prepa de probabilidad y estadística. Un insulto a la inteligencia de todos los mexicanos, especialmente a aquellos que contaban con educación media superior. Por desgracia en la pirámide de la educación nacional el porcentaje es bajo. Sin embargo eso no impide que podamos ser conscientes de las irregularidades vividas antes, durante y después del día de las elecciones.

No sólo la actuación de partidos políticos e instituciones estuvieron fuera de la legalidad antes de tan esperado evento para la nación, usando los medios masivos para infiltrarse en la mente de los más desfavorecidos, sino que además, utilizaron su influencia para desviar la atención de lo realmente importante: El Proyecto de Nación. Un pánico generalizado inundó al país, el miedo a perder todo o lo poco que se había logrado en los últimos años fue el protagonista de tal epidemia.

El día tan esperado llegó. La gente salió y votó, muchos por miedo, otros por convicción y unos cuantos con la tranquilidad de haber conocido el Proyecto de Nación de cada uno de los candidatos.

Tristemente, como ha sucedido a lo largo de la historia de nuestro país, se dieron irregularidades. Desde el inicio en el conteo rápido hasta el resultado final siempre se mantuvo una censura a la información en los medios de comunicación. A diferencia de las elecciones pasadas en las cuales la gente sabía minuto a minuto como iba el "marcador", en esta ocasión no fue así. La gente no tuvo acceso a esta información a través de los medios masivos más que al inicio y al final, de esta forma, no se puede ver el "recorrido" del conteo y por lo tanto, deja en duda la veracidad del evento.

Seguimos con las irregularidades... La gente pide contar "voto por voto". Lo que más me llamó la atención fue la renuencia no sólo de las autoridades electorales sino también de los ciudadanos "de a pie" que en muchas ocasiones se expresaban a cerca de los ciudadanos indignados como unos "ridículos". Esto principalmente me ocasionaba sentimientos de tristeza y desamparo, al ver que mis compatriotas de alguna forma no apoyaban la transparencia. Algo que me dejaba pensando era lo siguiente: si ya se hicieron los conteos por casilla una vez, ¿porqué no se hacen una vez más? Se que lo que acabo de escribir suena descabellado pues, para el primer conteo la población mexicana estuvo directamente involucrada, dentro de un proceso bien organizado y legislado, pero, si es "el pueblo" el que pide un nuevo conteo, y de acuerdo a nuestra Constitución, en el Pueblo recae el poder, ¿porqué no hacer un nuevo conteo?

Por otro lado está el hecho de que el Tribunal Federal Electoral anuló toda posibilidad de esclarecimiento del evento, hecho que alegró a muchos e indignó a muchos otros pues, ¿qué se puede esperar de una institución tendenciosa? De nuevo no se guiaron por la máxima autoridad de la nación: "La Constitución".

En el recuento, el daño fue para todo el pueblo mexicano, lo seguirá siendo hasta que la nación exija su derecho a gobernar. Para lo cual, quise contribuir un poquitito con esta reflexión ya que los candidatos empezarán a apabullarnos con sus propuestas, ofertas, mentiras y promesas con tal de obtener un beneficio personal y como siempre, favorecer a quienes los impulsaron para llegar a la cima. Como siempre, nosotros, los ciudadanos de a pie, no estaremos en la lista de los favorecidos y es por eso que, no importa realmente por quien votemos sino que nuestro voto sea razonado, no basado en el miedo o la apatía del momento.

Finalmente, quiero añadir un capítulo de más de 50 que se tienen en línea acerca del fraude electoral que nos dañó a todos en el 2006. Este conjunto de videos contienen explicaciones muy concretas de todo lo ocurrido a lo largo del proceso electoral y de cómo se manipularon tanto los medios como las instituciones para el favorecimento de unos cuantos (la oligarquía que no desea perder su "status quo".).


Espero que todos, especialmente los apasionados con el tema, puedan ver este conjunto de videos que presentan valiosa información sobre nuestros derechos y las leyes para los mexicanos.

Añado una liga a la información de un libro interesante en referencia al fraude:


Actualizado el 5 de marzo de 2014.

martes, 19 de enero de 2010

De regreso a la red


Pues por muchos, muchos, muchísimos años decidí alejarme de expresar mis ideas. Veo ahora que, aunque sigue siendo "igual" de seguro, la gente siente una enorme necesidad de decirle al mundo lo que piensa, y no me excluye, después de todo, soy parte de la gente...

Por un lado, tener la necesidad de expresar mis sentimientos o pensamientos me remonta a la época en la cual creía que mis ideas eran verdaderamente valiosas. No sólo eso, sino que tenía la ilusión de proporcionar un pedacito de mí para mejorar al mundo. Desgraciadamente esa llama se fue apagando, hasta la apatía, hasta convertirme en una piedra, dura, fría, sin vida. El sistema hizo bien su trabajo...

Recuperar la calidez y energía ha sido la labor más difícil a la que me he enfrentado en la vida y, por si fuera poco, aún dudo de ser capaz de llegar a ser la persona que quiero.

Cuando nos metemos en temas filosóficos podemos terminar enmarañados de ideas, como diría mi querida hermana... uno se siente un gran escritor y protagonista de su vida, pero en realidad damos tumbos hasta llegar a un lugar en el cual los golpes ya no se sienten tan fuertes... o eso creemos...

El escritor neófito siente que tiene todo un sin fin de ideas por plasmar, el experimentado sabe que no cualquier conjunto de letras son "Escritura", más aún, ni siquiera saber utilizar el lenguaje nos garantiza un fondo con sentido y calidad. Sin embargo, heme aquí, escribiendo como si en realidad supiera lo que hago... Compartiendo con el vasto mundo un pedacito de mi... algo que muchas veces siento que no sirve para nada y no me enaltece pero que de alguna forma logra inyectarme de esperanza y autoestima...

Bienvenidos sean a una probadita de mi realidad, de mi vida y de mi mundo... Espero lo disfruten tanto como yo disfrutaré escribir y compartir mis ideas y si no, estoy lista para la realidad.